Bartolillos madrileños rellenos de crema

Bartolillos Madrileños Rellenos de Crema: Delicia Crujiente y Sedosa de la Capital Española 🥛🍰🔥

1. Introducción

Los bartolillos madrileños rellenos de crema son uno de los postres más emblemáticos de la gastronomía española, con una tradición centenaria en las calles de Madrid. Estos exquisitos pastelitos fritos, caracterizados por su exterior dorado y crujiente que esconde un interior de suave crema pastelera, representan la esencia de la repostería tradicional madrileña. En este artículo, te guiaremos detalladamente en la preparación de auténticos bartolillos madrileños rellenos de crema, compartiendo todos los secretos para que puedas recrear este manjar en tu cocina y sorprender a familiares y amigos.

Si te apasionan los postres tradicionales, no puedes perderte esta receta que ha conquistado generaciones. Según los expertos de Bon Viveur, los bartolillos son una de las preparaciones dulces más representativas de la cocina madrileña.

2. Ingredientes

Para preparar unos auténticos bartolillos madrileños rellenos de crema que te transporten directamente a las pastelerías tradicionales de Madrid, necesitarás reunir los siguientes ingredientes de primera calidad:

• 500 g de harina de trigo (preferiblemente de repostería)
• 100 g de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
• 200 ml de agua mineral fría
• 1 pizca de sal fina
• 1 huevo grande (preferiblemente campero)
• 1 litro de aceite de girasol o mezcla para freír
• Azúcar glas ecológico para decorar

Para el relleno de crema pastelera (el alma de los bartolillos):

• 500 ml de leche entera fresca
• 100 g de azúcar blanco
• 50 g de harina de maíz (Maizena)
• 1 rama de canela de Ceylán
• 1 corteza de limón ecológico (solo la parte amarilla)
• 1 yema de huevo extra para dar más cremosidad

Si buscas otras recetas con ingredientes similares, te recomendamos probar nuestro postre italiano con queso mascarpone o estas deliciosas tartaletas de berenjena y queso.

3. Preparación paso a paso

Paso 1: Elaboración de la masa perfecta

En un bol amplio de acero inoxidable o cristal, tamiza la harina junto con la pizca de sal para evitar grumos. Añade la mantequilla en trozos pequeños y comienza a integrarla con la harina usando las yemas de los dedos, como si estuvieras haciendo migas, hasta obtener una textura arenosa homogénea. Este proceso es crucial para lograr la textura característica de los bartolillos.

En el centro del bol, haz un volcán y añade el huevo batido ligeramente. Incorpora el agua fría poco a poco (puede que no necesites toda) mientras amasas con energía. La masa debe quedar suave, elástica pero no pegajosa. Si necesitas más consejos sobre masas, visita nuestra sección de recetas para el desayuno.

Forma una bola, cúbrela con film transparente y deja reposar en la nevera durante al menos 30 minutos. Este reposo permite que el gluten se relaje y la masa será más fácil de trabajar.

Paso 2: Crema pastelera tradicional

La crema pastelera es el corazón de los bartolillos madrileños. En un cazo antiadherente, calienta la leche con la rama de canela y la corteza de limón a fuego medio. Justo antes de que llegue a hervir (cuando aparezcan burbujas en los bordes), retira del fuego y deja infusionar durante 10-15 minutos tapado para que los aromas se impregnen bien.

Mientras, en un bol aparte, mezcla el azúcar con la harina de maíz y la yema de huevo hasta obtener una pasta homogénea. Cuela la leche infusionada para eliminar la canela y el limón, y viértela poco a poco sobre la mezcla de huevo, removiendo constantemente con unas varillas para evitar grumos.

Vuelve a poner la mezcla al fuego suave y cocina removiendo ininterrumpidamente con una cuchara de madera hasta que espese (unos 5-7 minutos). La crema debe cubrir el dorso de la cuchara. Retira del fuego, cubre con film transparente en contacto para evitar que se forme costra y deja enfriar completamente.

Paso 3: Dar forma a los bartolillos

Sobre una superficie ligeramente enharinada, estira la masa con un rodillo hasta obtener un grosor uniforme de 2-3 mm. Usa un cortapastas redondo de unos 10 cm de diámetro o un plato pequeño como guía para cortar círculos perfectos.

Coloca una cucharada generosa (pero no excesiva) de crema fría en el centro de cada círculo, dejando al menos 1 cm libre en los bordes. Humedece ligeramente el borde con agua usando un pincel de repostería o el dedo, dobla la masa por la mitad formando una media luna y presiona bien los bordes con los dedos primero, luego con un tenedor para sellar herméticamente y crear ese característico dibujo en los bordes.

Para más ideas de platos con formas creativas, mira nuestra receta de coliflor de forma diferente o estas albóndigas en salsa de tomate.

Paso 4: Freído perfecto

En una sartén honda o freidora, calienta abundante aceite a 170-180°C (usa un termómetro de cocina para mayor precisión). El aceite debe estar bien caliente pero no humeando. Introduce los bartolillos de 3 en 3 para no bajar demasiado la temperatura del aceite.

Fríelos durante aproximadamente 2-3 minutos por cada lado, hasta que adquieran un color dorado uniforme. Usa una espumadera para darles la vuelta con cuidado y retíralos cuando estén dorados. Escúrrelos sobre papel absorbente de cocina y deja que se templen ligeramente antes de espolvorear generosamente con azúcar glas por ambos lados.

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4. Consejos de expertos para unos bartolillos perfectos

• Control de temperatura: La masa debe reposar en frío (nevera) para que sea más manejable y quede más crujiente al freír
• Equilibrio en el relleno: Usa aproximadamente 1 cucharada sopera rasa de crema por bartolillo (unos 15g) para evitar que se abran durante la fritura
• Técnica de sellado: Presiona bien los bordes y usa el tenedor para crear un sellado decorativo que impida que salga la crema
• Control del aceite: Mantén la temperatura constante entre 170-180°C. Si el aceite está demasiado caliente, se dorarán por fuera pero quedarán crudos por dentro
• Momento ideal para servir: Los bartolillos madrileños rellenos de crema son mejores tibios, cuando la crema está caliente pero no quema

5. Variaciones creativas

La receta tradicional de bartolillos madrileños rellenos de crema admite múltiples variaciones para adaptarse a todos los gustos:

• Versión con chocolate: Añade 50g de chocolate negro fundido a la crema pastelera
• Toque cítrico: Incorpora ralladura de naranja a la masa o a la crema
• Bartolillos horneados: Para una versión más ligera, pincela con huevo y hornea a 180°C durante 20 minutos
• Mini bartolillos: Perfectos para fiestas, haz porciones pequeñas de 5cm
• Relleno alternativo: Prueba con dulce de leche, crema de avellana o mermelada de frambuesa

6. Historia y curiosidades

Los bartolillos madrileños rellenos de crema tienen sus raíces en las pastelerías conventuales del siglo XIX en Madrid. Su nombre proviene probablemente del término “bartolo”, usado coloquialmente en Madrid para referirse a cosas grandes o importantes. Originalmente se preparaban para celebraciones especiales y fiestas patronales.

Durante las fiestas de San Isidro, patrón de Madrid, es tradición acompañar las rosquillas con bartolillos. Según los archivos históricos, ya en 1890 se vendían en las pastelerías de la calle Toledo, donde competían en popularidad con los buñuelos de viento.

Una curiosidad: la forma de media luna de los bartolillos podría tener influencia de la repostería árabe, adaptada durante la convivencia de culturas en la España medieval. Para más historias gastronómicas, visita nuestro blog de cocina.

7. Información nutricional (por unidad)

• Calorías: 250-280 kcal
• Hidratos de carbono: 32g
• Proteínas: 5g
• Grasas: 12g (de las cuales 6g son saturadas)
• Fibra: 1g
• Azúcares: 15g

8. Conservación y consumo

Los bartolillos madrileños rellenos de crema son ideales para consumir recién hechos, pero si necesitas conservarlos:

• A temperatura ambiente: Hasta 24 horas en recipiente hermético (sin azúcar glas)
• En nevera: Hasta 3 días (recalentar en horno a 160°C 5 minutos)
• Congelación: Solo la masa sin freír y sin rellenar (hasta 1 mes)
• Recalentar: Nunca en microondas (la crema puede derretirse), mejor en horno tradicional

9. Conclusión

Preparar bartolillos madrileños rellenos de crema en casa es un maravilloso viaje a las tradiciones dulces de Madrid. Aunque requieren cierta dedicación, el resultado -un crujiente exterior que esconde una sedosa crema perfumada con canela y limón- vale cada minuto invertido. Este postre, que combina la sencillez de sus ingredientes con la maestría de su técnica, es perfecto para ocasiones especiales o simplemente para darte un capricho gourmet.

Te animamos a probar esta receta y experimentar con tus propias variaciones. Y si buscas más inspiración dulce, no dejes de explorar nuestra sección de recetas donde encontrarás desde postres hasta platos principales. ¡Que disfrutes de estos pedacitos de Madrid en tu mesa!

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